30.10.09

Depeche Mode. Tour of The Universe. Santiago



Más tarde que nunca es el lema de este blog, porque aunque ya han pasado 15 días del concierto de Depeche Mode, tenía que comentarlo.
Depeche Mode es una banda emblématica en la industria musical, llenadora de estadios y con una influencia que pocas bandas tienen, En el ámbito personal es una banda que ha estado presente a través de todo mi adolescencia, musicalizando cada momento con sus 20 años de trayectoria.
Desde hace mucho tiempo que consideraba un sueño poder verlo en vivo y vibrar con sus clásicos en un espectáculo en vivo y puedo decir que ese sueño se transformó en realidad ese días jueves 15 de Octubre a las 21 horas en Santiago, las espectativas fueron superadas con creces ya que no se pudo ver una gota de cansancio porque todos sabemos que tienen un largo camino recorrido en el cuerpo.
Todo partió el día jueves a las 18 hrs cuando llegue a Santiago, donde me acomodé en Cachan vip y logré tener un buena ubicación. Las ansias invadieron mi cuerpo cuando ya caía la noche. El primer acordé de In Chains me hizo vibrar y no poder creer que estaba viendo a una de las bandas más importantes de mi vida en vivo.
Siguió con el single Wrong, donde Dave Gahan se mostraba entusiamado y un tímido Martin Gore situado con su guitarra veía todo, mientras el estático Andrew Fretcher miraba desde su puesto en el teclado.
El primer momento de euforia se vivó cuando tocaron el éxito de 1993 Walking in My Shoes, donde un club hípico coreaba sus letras y yo, particularmente, me sentia extasiada, mientras se veía una serie de imagenes de una ave.
Siguiendo con los exitos, It's no Good, sencillo del álbum Ultra, que dejó claro que Depeche Mode es existoso en Chile ya que no existía alma en el estadio que no coreaba su famoso coro.
Recordando los principios de la banda, siguie Question of Time una enérgica canción que el mas fanático agradecio que tocaran.
Del álbum anterior, Playing An Angel, solo se escucho el meláncolico Precious.
Volviendo a los clásicos, Fly on the Windscreen le seguió, donde yo me daba por satisfecha, siendo uno de las canciones memorables de la banda.
Dave deja el escenario para cederlo al talentoso y multifácetico Martin Gore, que con una traje llamativo que contrastaba con su personalidad entonó Jezabel, del nuevo álbum Sounds of the Universe y el el meláncolico Home que hizo vibrar las cuerdas vocalas de todas las almas que llenamos el Club Hípico. Martin impresionó con su calidad vocal.
Volviendo Dave, tocan Miles Away/the truth is. Cancion del Sounds of the universe. Donde un mundo se proyectaba en las pantallas gigantes.
Tocando un éxito de su mítco Violator, Sale Police of Truth donde Dave dejo en claro por lo que es conocida, su personalidad arriba del estadio con muchas ganas y hasta bailes que eran agradecidos por los 30.000 fans asistentes.
Los primeros acordes lo anunciban, I Feel You, uan versión mucho más rock y potente se escuchba de manos de la guitarra de gore. El coro del club hipico se hacia notar, cada persona a mi alrededor agreadecia habaer estado para precenciar esa canción que no dejo ninguna duda porque Depeche Mode, es la leyenda viviente que es.
El clásico de los clasico siguió, el temazo Enjoy the Silence, donde cada uno de los asistentes se dio por pagado. Las pantallas gigantes proyectaban a Martin, Andrew y Dave vestidos como astronautas que no dejo a nadie asombrados por la puesta en escena. El coro mítico de la canción fue cantada a todo pulmón por el publico, donde Dave afirmaba que era una buena audiencia.
El cierre fue dada por Never Let You Down,donde los brazos como espiga se esparcian por todo el lugar. Y el coro era potente.
Se retiran con un gracias, pero todos sabimos que esto no había terminado aun.
El primer encore lo abre Martin Gore con una versión acapella de Somebody, donde el público se vio sorprendido de que tocaran clásicos tan antiguos. El ambiente melancolico invadio a cada una de las personas.
Uno de mis momentos más felices y emocionantes fue cuando se escucho por primera vez la musicada de Stripped, una de mis canciones favoritas del Black Celebration, donde yo daba por pagado el concierto.
Y cierran nuevamente con behind the wheel, donde la euforia puesta por los fanticos fue retribuida por el entusiamo de Dave.
El 2 y último encore parte con el clásico de 1990 Personal Jesus, donde las pantallas gigantes proyectaban a los 3 integrantes de la banda de Essex bailando. Dave con sus movimientos típicos y Andrew y Martin más rigidos que el vocalista. Esta canción mostro el verdadero estado de la banda donde la energía invadía el ambiente y se mostro una excelencia musical y vocal de parte de cada una de las partes de la banda. El público le retribuyo como se merecía el famoso coro.
El punto final lo dío la calmada y hermosa cancion del Violetor Waiting for the Night, una versión donde solo el piano acompañaba las voces de Dave y Martin que se despidieron agradecidos por la recpción del público chileno con un: See You Next Time

Me di por pagada y ahsta el día de hoy no puedo creer la magia que se vivó aquel día, convirtiendose así en el mejor concierto al que asistí y será muy díficil superarlo.